Cómo los nuevos límites afectan multas por exceso de velocidad y la prima del seguro de coche

Las recientes revisiones de límites y el refuerzo de los controles de velocidad hacen que muchos conductores vean más riesgo de sanción y de impacto en su seguro. Qué es: es el cambio en los límites máximos y en la intensidad del control (radares y sistemas automáticos). Para qué sirve: pretende mejorar la seguridad vial y reducir emisiones, aunque también aumenta la probabilidad de multas registradas.

Multas y umbrales

Los radares y cámaras registran excesos con tolerancias pequeñas; la policía aplica criterios distintos según el tipo de vía y el margen detectado. En general, los excesos leves pueden dar multas económicas, mientras que los excesos reiterados o importantes llevan sanciones más severas y pérdida de facultades administrativas.

• Rango de multas habituales: desde cantidades moderadas hasta importes superiores en caso de exceso grave.
• Consecuencias: sanción económica, posible retirada de puntos y, en casos extremos, suspensión administrativa del permiso.
• Umbrales prácticos: un exceso sostenido de 10–30 km/h suele elevar el riesgo de sanción significativa; más de 30 km/h se considera grave en muchas circunstancias.
• Tolerancias: factores como error del velocímetro y margen de calibración del radar pueden ser de unos pocos km/h; dejar 3–7 km/h de margen ayuda.

Impacto en la prima

Las compañías valoran el historial de siniestralidad y sanciones. Un único apercibimiento menor rara vez cambia la prima, pero las multas repetidas o los excesos importantes sí pueden provocar recargos o pérdida de bonificaciones.

• Seguros con telemática (dispositivo que registra y envía datos de conducción): pueden penalizar comportamientos o, al contrario, premiar conducción tranquila.
• Aumento de prima: en casos claros de conducción de riesgo la subida puede situarse en un rango notable (p.ej., incrementos frecuentes de entre 5% y 30% según perfil y aseguradora).
• Cancelación o no renovación: es posible en conductas muy graves o reiteradas; revisar cláusulas antes de firmar.
• Pruebas para recurrir: dashcam (cámara de salpicadero) o registros OBD (Puerto de diagnóstico a bordo) pueden aportar evidencia, siempre respetando la normativa de protección de datos.

Consejos prácticos

Los conductores jóvenes y tech-savvy pueden usar apps y dispositivos para reducir riesgo. Ajusta alertas y documenta circunstancias si necesitas recurrir una sanción.

• Configura tu app de radares con alarmas a 3–7 km/h por debajo del límite para compensar tolerancias.
• Si tienes telemática, consulta qué datos se comparten y cómo afectan la prima.
• Guarda pruebas: vídeo de dashcam y datos de telemetría ayudan a impugnar multas cuando procede.
• Mantén ADAS (sistemas avanzados de ayuda a la conducción) calibrados; un fallo puede generar avisos erróneos o comportamientos no deseados.
• Recuerda que cambios en la aerodinámica (portabicicletas, baca) no afectan a multas pero sí al consumo: una baca vacía penaliza ~0,3–0,5 L/100 km.

Checklist

• Revisa tu póliza y cláusulas sobre telemática antes de aceptar cambios.
• Activa alertas en tu app a un margen de seguridad (3–7 km/h).
• Instala o comprueba dashcam y guarda grabaciones útiles.
• Solicita a la aseguradora informes si te notifican un incremento de prima.
• Recaba datos y recurre la multa dentro de los plazos legales si hay motivos.

Pasos inmediatos: ajusta tu app de radares, revisa si tu seguro usa telemática y guarda pruebas en caso de incidente. Si te notifican un recargo, pide explicaciones y compara ofertas antes de renovar.